Santa Venerina es una agradable y tranquila población de las laderas del etna, que limita con Zafferana Etnea, y que gracias a que está a apenas 3 km de la salida de la autovía que va de Catania a Messina (salida Giarre), podemos contemplar como opción para pernoctar en nuestro ataque para subir el Etna.
Habitada desde época romana (se data unas termas), destaca la Iglesia Madre dedicada a Santa Venera, con pinturas de Alessandro e Pietro Paolo Vasta. La población cercana de Dàgala del Re (Dagala significa la isla de tierra que queda intacta en medio de una colada de lava) guarda restos de un templo cristiano.
En Santa Venerina, además del Museo del Palmento que fabrica cerámica artesanal, hay un par de trattorias donde se comen platos de la gastronomía catanesa, confeccionados con productos de la huerta local.
Perdidas entre viñas y citricos han proliferado algunos Bed And Breakfast en antiguas casas de labradores.